El día 24 de noviembre se celebró el 32º aniversario de la declaración de Cáceres como Ciudad Patrimonio de la Humanidad de España. Con tal motivo, el Excmo. Ayuntamiento de la ciudad organizó una serie de actividades culturales y de divulgación bajo la denominación “Cáceres, Patrimonio Abierto”. La correa de transmisión que hizo funcionar la jornada tuvo en la apertura gratuita de los monumentos hasta la medianoche su máximo exponente. Centros de interpretación, museos, palacios, adarves y torres de la muralla se sumaron a la jornada y toda la ciudadanía interesada en conocer el casco histórico desde la particularidad de la noche y con la impresionante y premiada iluminación pudo hacerlo en el mejor de los ambientes.

Dos de nuestros compañeros, Antonio Cancho y Carlos Marín, contribuyeron desinteresadamente, nada más allá de la satisfacción personal, a la realización de visitas guiadas a la conocida como Torre de las Cigüeñas, perteneciente al palacio de Diego de Cáceres Ovando. Sus acompañantes contemplaron con ellos las inmejorables vistas de su terraza y comprendieron el contexto histórico crucial en el que la construcción se erige: la más elevada por expreso privilegio de Isabel la Católica, que la eximió del desmoche mediante el que se amputaron las demás torres de las casas señoriales de la ciudad.